El disco de TAROX G88 es probablemente el más conocido de todos los discos TAROX y el más instantáneamente reconocible con sus múltiples ranuras radiales mecanizadas en la superficie del disco utilizando rigurosos procesos a medida. Las ranuras de G88 están diseñadas para generar un efecto de turbina que disipa la acumulación de calor, permitiendo que los discos funcionen más fríos y reduciendo la posibilidad de deformación, vibración o agrietamiento. Todos los discos G88 de TAROX se basan en la especificación del equipo original, fundiciones aprobadas por el TÜV, tratadas térmicamente para la resistencia, terminadas a mano asegurarando asi la superficie de frenado más suave posible y ahora muchas aplicaciones son TÜV y ABE aprobado por la KBA aleman.